martes, 14 de agosto de 2012

Silencio

Hasta ahora, David Lynch nos tenía acostumbrados a transitar por esa delgada línea que divide la razón de lo soñado. Un viaje sensorial guiado por la camaleónica creatividad de este artista, músico y director cinematográfico a quien el mundo que conocemos se le quedó pequeño hace mucho tiempo. 
Por suerte,  sus seguidores hemos podido hacernos eco con el tiempo de gran parte de su genialidad a través de la gran pantalla. No conforme con dejarla habitar ahí, Lynch ha decidido acercárnosla un poco más en un inusual intento de comunión total con su público. 
Se trata del Club Silencio, el mítico local lynchiano que hace un año abandonó las calles de Mulholland Drive para encontrar acomodo en el 142 de la rue Montmartre de París. 
Con una arquitectura, mobiliario e interiorismo diseñado por el director de Twin Peaks, el Silencio ofrece a sus miembros y acompañantes un cine, una pista de baile, y una librería concebidos como una extensión del propio Lynch, que como él mismo afirma, "no tiene ventanas, así que una vez dentro podrías estar en cualquier sitio o en ninguna parte". O lo que es lo mismo, en una de esas realidades paralelas que sólo David Lynch sabe crear.





lunes, 6 de agosto de 2012

Formas

Hasta ahora, Mariano Rajoy había demostrado una notable capacidad para el escapismo a la hora de enfrentarse a los periodistas. Una disciplina que, a la vista de lo ocurrido hace unos meses en el Senado, parece dominar en sus más diversas variantes. Semana tras semana, observamos cómo permite que su núcleo duro suplante su identidad presidencial siempre que ésta le exija dar la cara ante los ciudadanos, abocados más que nunca a buscar en los medios las respuestas que el Gobierno les niega. 
Ante esta situación, el siguiente paso no se hizo esperar, y el correctivo ideologizado aplicado vía Julio Somoano ya está dando los frutos esperados. Por el momento Juan Ramón Lucas, Toni Garrido y Pepa Fernández cesados de RNE, y Xabier Fortes (La Noche en 24 Horas) y -por encima de todos-, Ana Pastor (Los Desayunos de TVE) en TVE. La periodista -famosa por hacer que los políticos se removieran en sus asientos en cada una de sus entrevistas, declaraba en la entrega de los Premios Iris convertida en un emotivo homenaje a la labor de Fran Llorente: "Mi obsesión es poder mirar toda la vida a mi hijo a la cara, porque no quiero que se avergüence y alguien le diga que su madre agachó la cabeza ante el poder"
A cambio, este nuevo Gobierno nos ofrece una libertad de información intervenida en la que se recompensa la vuelta del entorno de Alfredo Urdaci y el lamentable savoir-faire de Telemadrid, esa prolongación de Esperanza Aguirre que ejemplifica a la perfección aquel "Ya sé que le gustaría hacerse usted las preguntas y respondérselas usted" que Pastor le dejó caer para hacer frente a sus constantes evasivas. Llegados a este punto, ahora soy yo quien se pregunta qué pensará Andrea Fabra de todo esto, aunque, conociéndola, ya me imagino su respuesta. Qué pena.